Todo. Maravilloso. El personal atento, el bar estupendo (la carta standard pero está bien), las habitaciones llenas de detalles. Mejor que estar en casa
El hotel es muy bueno, debo hacer un reconocimiento especial a la cama, ya que suelo dormir mal en los hoteles, esta cama era muy cómoda y enorme, dormí casi como en casa. El desayuno era muy bueno, todo tan ideal que decidimos alargar nuestra estadía un día más para celebrar Nochebuena en el hotel. Hubo un Buffet excelente, todo muy bien preparado. Sin duda volveremos.
Todo el personal te hace sentir como en casa. Tienen cocina para que te cocines tu y también restaurante, para no tener que ir a buscar nada fuera. Muy cómodo. Las duchas tienen su cuartito privado con banco. Tiene billar y futbolín debajo.
El hotel está en una casa reformada con mucho gusto y comodidad. Su ubicación es buena cerca del centro histórico y con un jardín fantástico.