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La amabilidad de la gente. Tuve la oportunidad de asistir al Fandango el sabado por la noche y es un espectaculo digno de ver. La visita al Teatro Netzahualcoyotl es fascinante. Visitar los templos es gratificante. Y poder admirar las casas y calles de la ciudad es algo sumamente agradable. La comida es muy sabrosa, excelentes tamales, toritos, nieves; y no twe puedes perder las empanaditas de guayaba!!

Muy bonito lugar, el verdadero tosoro es su gente. Es un pueblo muy tranquilo de esos que ya quedan pocos. Excelente lugar para descansar. La comida barata y con sazon casero, comí en el mercado y en el malecon y todo rico. Es un pueblo pequeño que se recorre caminando cuando la temperatura es cómoda porque hace mucho calor en algunos momentos. Puedes quedarte a platicar con todas las personas, todos los tlacotalpenses tienen algo que decirte y lo hacen con gusto. Lugar con mucha historia y tradicion de canto.

Es un lugar muy bonito y tranquilo. Vale la pena caminar por todo el pueblo, ver el atardecer desde el muelle, comer en una fonda tradicional con una sazón increíble, probar su pan y empanadas de guayaba, visitar el mercado, sus plazas y parques y el ayuntamiento, así como disfrutar del color y pintoresco de sus casas.

Es muy importante que el lugar posee un sistema de recoleccion de basura eficiente. No se ven animales en las calles, lo que indica el compromiso de los habitantes por sus mascotas, esto es muy loable. El respetar la arquitectura original de sus edificaciones requiere la participación de políticas públicas, esto también es muy meritorio. Si debo escribir sobre algo que no me gustó, no encuentro qué; su postre de mostachones de almendra son una delicia!

Es un lugar pintoresco y muy limpio No tiene muchos puntos de interes pero es un lugar perfecto para descansar y rentar una bicicleta para recorrer el pueblo Por las noches es indispensable utilizar repelente

La comida en restaurante LOS JAROCHOS....deliciosa!!!! Para desayunar, restaurante Doña Mari Carmen.